Vacaciones como en casa

Noelia Ramírez/ elperiodico
Barcelona

• El intercambio de viviendas se consolida en España como una alternativa mucho más barata para viajar

• El ahorro alcanza el 46% en las estancias de más de tres semanas

A la incomodidad de escoger alojamiento y gastar dinero en hoteles mientras se viaja le ha surgido una alternativa económica y de enriquecimiento personal. Desde hace unos años, los trastornos que implican elegir dónde pasar las vacaciones familiares, asumir una oferta de trabajo o la aparición de un viaje inesperado son más llevaderos gracias a la opción de intercambio gratuito de la vivienda. Esta nueva fórmula en la experiencia viajera se define por si misma: se disfruta la propiedad de otra persona que, mediante un pacto de intercambio, le presta la suya en el lugar al que debe trasladarse.

Miles de españoles se decantaron por esta experiencia durante el 2006 gracias a portales de internet que facilitan las gestiones necesarias y ponen en contacto a los interesados. El procedimiento es fácil, previo abono de una cuota por temporada (que nunca supera los 100 euros), tan solo hay que añadir en la base de datos de la empresa una ficha con toda la información referente a la vivienda que se ofrece, los datos personales, la ciudad a la que se desea viajar y el tiempo que se espera pasar en la misma, que no siempre se corresponde con el periodo vacacional.

Adaptar el tiempo

Estibaliz Martínez, fundadora de intercambiodecasa.es, uno de los portales operativos en la red, destaca el factor tiempo dentro de la fórmula. "Hoy en día no pueden establecerse reglas, las vacaciones son estacionales y la gente se adapta, hay que pensar que se puede intercambiar por un fin de semana o el año completo". Según un estudio propio de la empresa, el 52% de los cambios suelen durar de 10 a 29 días; el 24%, un mes; el 19% de dos a nueve días y el 5% tiene una duración media de un año.

Martínez, exazafata que comenzó intercambiando su vivienda mediante "hojas de Excel con gente que había conocido en viajes de trabajo", ha terminado creando una empresa, con sede en Vitoria, que cuenta con más de 2.800 propiedades en 50 países en la base de datos. Para la fundadora, el ahorro económico es "una de las ventajas de esta opción a la hora de viajar". No obstante, añade que, "para otros el hecho de sentirse como en casa, con todo las comodidades que incluye", es el factor predominante en la elección.

Más ahorro

Economizar el viaje es uno de los atractivos de esta fórmula ya que puede suponer, según una estimación del portal especializado, un ahorro del 46% a la hora de realizar desplazamientos al extranjero que superen las tres semanas.

¿Existe un perfil del usuario? Para M° Ángeles Sas, responsable española de Intervac, otra de las empresas mundiales que opera en este sector desde 1953 y cuenta con más de 11.500 socios, "hay de todo, desde jubilados a familias, pasando por parejas o solteros". Además, desde Intervac se destaca que en el caso del intercambio familiar, los países de habla inglesa son los más solicitados, ya que "todos pueden practicar un nuevo idioma". Sobre los destinos, que existen por todo el mundo, Sas dice que se escogen en función del interés y del tiempo del usuario.

Miguel Díaz, consultor de 32 años y cliente de intercambiodecasa.es, ha canjeado dos veces su piso, de 90 metros en el centro de Barcelona, para viajar al extranjero con toda su familia. "El año pasado fuimos a Nueva York durante 10 días y este verano nos hemos marchado a París dos semanas". Díaz, que repetirá en diciembre viajando hacia Hawai, --"algo que nunca pensé que podía permitirme"-- describe esta fórmula como una "opción perfecta para descubrir, ahorrando dinero, una ciudad sintiéndote menos turista y más ciudadano".

Contratar un seguro

Frente a posibles reticencias por todo lo que conlleva prestar el hogar a un desconocido, Mª Ángeles Sas aconseja escoger compañero con experiencia en el intercambio. "Si una persona ha repetido, es porque no ha dado problemas y la organización le permite seguir intercambiando". Desde Intercambiodecasa se aconseja la contratación de un seguro que cubra por posibles desperfectos en el hogar o del vehículo. El coche es otro objeto que también entra en el pacto de intercambio, junto a otras comodidades como la conexión a internet y la red telefónica.

Asimismo, los intercambios no tienen por qué ser equitativos: se puede cambiar todo tipo de viviendas. "Aquí no hay reglas", cuenta Mª Ángeles Sas. La mayoría de gestiones se articulan en función del interés que mueve al viaje. "Hemos cambiado una buhardilla en el Gòtic por un chalet con piscina en California. El usuario americano quería algo céntrico con encanto y el español relajarse al sol".