Los promotores piden más crédito y la banca endurece las condiciones

M. Jiménez Botías y S. Sabrià
elperiodico
Barcelona

• Las pymes constructoras ponen de manifiesto restricciones en la financiación de proyectos
• Los financieros dicen que deben ser precavidos porque las condiciones del sector han cambiado

Un dicho popular afirma que los bancos dejan dinero al que menos lo necesita, y sin duda eso es lo que ahora se piensa en el sector inmobiliario. En el momento en el que se inicia un cambio de ciclo, con caídas de las ventas y una menor entrada de dinero líquido en las empresas constructoras y promotoras, acceder al crédito se complica. Cuando los industriales se acercan a cajas y bancos a pedir financiación para mantener la actividad se encuentran con un sector financiero más reticente a satisfacer sus necesidades.

El presidente del Gobierno, José Luís Zapatero y la ministra de Vivienda, Carme Chacón han hecho llamamientos a la banca para que no sea más cicatera de la cuenta, y los grandes del sector, como el director general de La Caixa, Juan Maria Nin, han respondido que "el grifo del crédito sigue abierto".

Hechos y palabras

En el sector inmobiliario, los pequeños y medianos promotores son los que hablan más claro y aseguran que los hechos contradicen las buenas palabras. Jordi Castellà, de la promotora PBIC, afirma que las restricciones al crédito empezaron antes del verano pero ahora han salido a la luz. Reconoce que el sector inmobiliario está en pleno ajuste, porque la demanda y la oferta no casan. Eulàlia Tort, promotora y gestora de suelo, es más contundente y asegura que el endurecimiento de las condiciones de los bancos llega casi al cierre total en algunos casos, como en la compra de solares. Mercè Puigfel, que promueve un centenar de pisos al año, asegura que los criterios de valoración de las hipotecas a los compradores de pisos han variado casi de un día para otro y esta dificultad de financiación acentúa la desaceleración de las ventas.

Cuando se plantea en el sector bancario si se ha cerrado el grifo del crédito se responde: "¿Cómo lo vamos a cerrar si dar créditos es la esencia de nuestro negocio?", dice.

Jaume Masana, director general adjunto de Caixa Manresa, una entidad con una fuerte actividad en la financiación de promotores inmobiliarios. Otra cosa es que las condiciones del mercado hayan cambiado. Ya no es como hace un par de años cuando cualquier promoción que salía al mercado se vendía antes incluso de iniciar la construcción.

En esa situación, los promotores contaban con la liquidez proporcionada por la compra sobre plano. "Ahora no es así, con lo que los empresarios tienen mayores necesidades de financiación, pero la banca no está en condiciones de aportar más recursos que antes", acota Masana.

La vara de medir

Se intenta diferenciar entre promotoras. La vara de medir es la estructura de endeudamiento de las inmobiliarias. "Incluso alguna gran compañía ha tenido dificultades para acceder a un crédito sindicado debido a su elevado endeudamiento", confirma Ángel de Frutos, responsable del área inmobiliaria del Banc Sabadell.

Frutos destaca que la estrategia del Sabadell es acompañar a los clientes en los proyectos inmobiliarios que llevan a cabo. "Cada vez hay menos advenedizos en el sector promotores no profesionales, pero eso no evita que seamos más selectivos en los proyectos inmobiliarios que financiamos". Para el Sabadell es básico que las promociones se ubiquen en áreas donde el banco pueda acceder al cliente final.

Otro aspecto a considerar es la participación de las entidades financieras en compras de suelo, que han perdido interés para el sector. Pere Gil, subdirector general de Caixa Terrassa, destaca que la caja no participa "en operaciones que impliquen la recalificación de terrenos". Y tampoco están interesados por la compra de suelo "cuando el promotor carece de la licencia de construcción".

Gil explica que Caixa Terrassa tiene una tasa de morosidad del 0,48%, la más baja de Catalunya junto con la de La Caixa. No es casualidad. "Intentamos ser muy precavidos con el crédito", dice, tanto con los promotores, como con el cliente final. La entidad es estricta con la financiación de solo el 80% del valor de tasación. "Si el cliente quiere más, le exigimos que venga con avales".