En verano los mercados no descansan
Jaime Pozuelo-Monfort/ finanzas
La crisis vivida por los mercados financieros a lo largo de las ultimas semanas únicamente confirma lo que todos ya sabíamos: que los mercados no se van de vacaciones, que el vaivén de subidas y bajadas puede tener lugar en el momento menos pensado, pues el ciclo alcista puede potencialmente agotarse en cualquier momento, pues la burbuja, ya sea tecnológica, inmobiliaria o de crédito, puede reventar en el momento menos pensado.
Ante un acontecimiento imprevisto el gestor debe protegerse con instrumentos financieros que permitan realizar una cobertura del riesgo de mercado, de crédito, de divisas o de tipos de interés. La innovación financiera ha propiciado que el gestor de carteras pueda vea el universo de instrumentos financieros crecer de forma vertiginosa, en una tendencia que ha hecho aumentar la variedad de instrumentos sofisticados.Una innovación financiera fundamentalmente positiva que tiene su lado oscuro en la sofisticación inusual y quizás indeseada de determinados instrumentos, que complican su modelización, que hacen la vida del inversor difícil porque se convierten en cajas negras cuyo comportamiento en términos de rentabilidad riesgo es cada vez más difícil de adivinar. Una innovación financiera, a veces ligada exclusivamente a la obtención del beneficio y alejada de la conveniencia de crear productos financieros útiles para el inversor profesional o particular.
La profundidad de los mercados financieros en Estados Unidos y la consiguiente diversificación del riesgo son a menudo referencia en el mundo industrializado. Pero una innovación financiera basada en la relajación extrema en las condiciones de concesión del crédito no es sinónimo de universalización del préstamo y democratización del acceso a la vivienda. La sociedad capitalista debe aprender que aquel que no puede asumir la devolución de un préstamo no debería endeudarse en primer lugar, y las entidades bancarias deberían responsabilizarse de comunicar al tomador de un préstamo o hipoteca, de las dificultades severas que podría afrontar.
Numerosos rasgos estructurales de las hipotecas basura las hacían apetecibles a prestamistas con perfil moroso: la posibilidad de recibir el 100% del valor de la vivienda, el pago durante los dos o tres primeros años de hipoteca de tipos de interés por debajo de los de mercado (teaser rates), o la concesión de hipotecas que no amortizan el principal y solo pagan intereses, son ejemplos de hipotecas en los que el prestamista no es totalmente consciente del impacto futuro de su decisión al día de hoy de meterse en un préstamo a menudo impagable.
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home