El ajuste que viene en el sector inmobiliario

EXPANSIÓN

El agotamiento del sector inmobiliario es ya una realidad. A pesar de algunas de las advertencias lanzadas desde las grandes inmobiliarias sobre un posible brusco repunte del precio de la vivienda en un año si no se solucionan los problemas de cuello de botella en el mercado del suelo, la coyuntura apunta en estos momentos en otra dirección.

La desaceleración en los precios de los pisos se hace cada vez más evidente mes a mes. En el último trimestre los precios de la vivienda se incrementaron un 5,3%, por debajo del 9,8% de 2006 y del 13,4% de 2005, según los datos que facilita la propia Administración. Algunas entidades financieras como el Deutsche Bank prevén incluso una caída de los precios el próximo año.

El crecimiento del crédito hipotecario se está ralentizando, ahogado por la crisis de confianza generada a raíz de los problemas surgidos por las hipotecas subprime. Las condiciones para acceder a un crédito para la compra de una vivienda se han endurecido por una doble razón. Por una parte, el sector financiero no quiere asumir mayores riesgos en el ámbito inmobiliario. Por otra, la propia escasez del crédito hace que las entidades sean ahora más selectivas.

La economía española crece aún a buen ritmo –en torno al 3,7% en el tercer trimestre– pero cada vez se hace más evidente que ni el sector de la construcción en general ni el de la vivienda en particular son las locomotoras de este tren. De hecho, los visados para la construcción de nuevas viviendas han caído alrededor de un 12% en lo que llevamos de año. El consumo de cemento ha caído en seis de los últimos siete meses, cuando el pasado año cerró con incrementos desde enero a diciembre. Y la compraventa de vivienda decreció a un ritmo del 8,8% en el segundo trimestre del año.

La clave sigue estando en el mercado de trabajo que, pese a aportar aún cifras positivas, empieza a dar también signos de agotamiento. Los próximos meses serán claves para evaluar el alcance de la crisis del sector inmobiliario.