Se construirán 200 mil viviendas menos: causarán 400 mil nuevos parados
El precio de los pisos se frena y crecerá por debajo de la inflación; las familias con hipotecas pagan ahora un 30 por ciento más que hace un año
Forum Libertas
Los promotores inmobiliarios constatan que el precio de las vivienda tenderá a la baja en los próximos tres años y su crecimiento, si lo hay, se situará por debajo de la inflación. Al mismo tiempo, las 200.000 viviendas anuales que dejarán de construirse pueden llevar al desempleo a unas 400.000 personas.
Las predicciones de la Asociación de Promotores Inmobiliarios de Madrid (Asprima) son concluyentes: El primer aviso fue la desaceleración del precio de los pisos en el primer trimestre de este año; después, los datos sobre la caída de la demanda de nuevas viviendas e hipotecas firmadas en 2006 no hizo sino confirmar la tendencia.
Ahora, un informe de Asprima presentado el pasado lunes, 28 de mayo, prevé para este año un encarecimiento de los pisos nuevos del 3 por ciento, un estancamiento para 2008 y, quizás, un ligero repunte del 1 por ciento en 2009.
Por debajo de la inflación
“Los precios registrarán crecimientos cero en valores reales”, aseguró José Manuel Galindo, presidente de los promotores inmobiliarios. “No se descarta un crecimiento real nulo o ligeramente negativo para 2008 o incluso para 2007”, agrega el informe.
La inflación creció el último año un 2,7 por ciento. Suponiendo el mismo comportamiento hasta 2009 y teniendo en cuenta los pronósticos de Asprima, el incremento del precio de la vivienda podría estar por debajo del de la inflación en un acumulativo que sobrepasara el 6 por ciento en ese período.
Cabe añadir que, siguiendo la estela marcada por el descenso del precio de la vivienda nueva, la de segunda mano tenderá también a bajar.
Euríbor, el principal escollo
La principal causa de este freno anunciado en el sector de la construcción es el incremento de las hipotecas por las constantes subidas de los tipos de interés, que reducen la demanda.
De hecho, el Euribor acaba de marcar su 20a subida consecutiva y alcanza el 4,37 por ciento, el máximo en los últimos seis años. En abril este indicador estaba situado en el 4,25 por ciento, y hace un año el 3,308 por ciento.
Estos significa que en un año las familias con hipotecas que depende de este indicador, la inmensa mayoría, se han visto afectadas por una subida de los tipos de interés de más de un 30 por ciento.
Menos PIB y más parados
Las imprevisibles consecuencias del freno del sector de la construcción han tenido, sin embargo, algunos certeros avisos. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), en un reciente informe, advirtió a España de que el crecimiento del PIB estaba topando con el ‘techo’ de la construcción.
La caída previsible tras una parálisis inmobiliaria, según la OCDE, podría ser desde el 4 por ciento alcanzado en 2006 hasta un 2,7 por ciento en 2008.
Por otra parte, Asprima ya ha contabilizado en unas 200.000 las viviendas que se dejarán de construir cada año. Frente a las cerca de 700.000 que se pusieron en el mercado en los años anteriores, en el próximo lustro se calcula que se edificarán unas 500.000 viviendas nuevas al año.
La patronal de las grandes constructoras españolas, SEOPAN, calcula que por cada vivienda nueva que deja de construirse se pierden de forma directa dos puestos de trabajo.
Así pues, si se dejan de construir unas 200.000 viviendas, alrededor de 400.000 trabajadores se pueden ver enviados directamente al paro. Además, la cifra puede ser mayor si se tienen en cuenta los desempleados que puedan derivarse de las empresas que dependen del sector inmobiliario.
Los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) correspondientes al primer trimestre de 2007 muestran un total de 1.856.100 personas desempleadas en España, entre nacionales (1.473.200) e inmigrantes (382.900). Sobre este total, el incremento del paro que supondría el descenso de construcción de viviendas sería de casi un 21,6 por ciento.

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